AGRADECER TAMBIÉN ES AMAR

El agradecimiento conecta la vida y es alimento para al ser humano. 

Agradecer con plenitud la experiencia de vivir, caminando hacia aquello que armoniza la vida, tu vida y la mía.

Agradecer es amar, amar sin apegos, amar respetando la vida en su totalidad. El Amar también necesita apartar el juicio de valor o destructivo.

Agradecer también es aceptar, aceptar la vida y sacar lo máximo de ella desde las posibilidades personales de cada ser. Agradecer lo material, forma parte de nuestra vida y vivencias.

Agradecer que cualquier ser humano está viviendo la vida, he intentando hacer las cosas lo mejor que sabe. Buscando sentido, buscando ilusión, buscando amor. Siempre con la intención de ser feliz. Agradecer que todos somos necesarios para vivir. Agradecer que el agricultor nos aporta alimentos, agradecer que el constructor nos hace casas, agradecer que el maestro nos da formación, agradecer que los padres nos dan la vida y un punto de partida, agradecer...

Agradecer que nuestro cuerpo físico aporta infinitas posibilidades y podemos hacer uso del mismo a voluntad. Agradecer a nuestras células, nuestros órganos, nuestros huesos, etc... por encargarse de mantener nuestro cuerpo con vida.

Se puede estar agradeciendo sin parar. Y "PARAR", también es importante para conocerse, sentirse, valorarse, escucharse y amarse sin ningún tipo de condicionamiento mental o físico. 

Te deseo felices fiestas y que el amor y el agradecer impregnen tu esencia. Y pueda, puedas y podamos amarnos sin condiciones. Desde el respeto, el encuentro, la aceptación.

Felices fiestas y felices encuentros.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por tu comentario