IMAGINA UN MUNDO DE AMOR


El amor es encuentro entre seres. El amor tiene el poder de alimentar las acciones de la vida. Si el amor forma parte de nosotros, contamos con un propulsor armonizante, de encuentro, de aceptación, de ilusión, de abrazo, de crecimiento, que además, da mayor sentido al vivir.

El amor produce comprensión, deja el juicio de valor de lado, ama sin necesidad de hacer o tener que demostrar nada. 

El amor requiere amar sin más. 

El rechazo es falta de amor y falta de compresión del otro. El amor diluye el rechazo. Necesitamos de amor para vivir como seres humanos felices. El rechazo al otro, por considerarlo diferente en raza, religión, forma de pensar, y cualquier juicio de valor que nos lleve al rechazo, no es más que una falta de consciencia de lo que realmente es un ser humano.

El ser humano vive la vida en función de factores familiares, sociales, culturales, que forman parte de su entorno. De ahí que seamos diversos. Y ahí está, lo bonito en el ser humano, entender la diversidad y amarnos libremente apartando los programas que nos hacen enjuiciar y rechazar la diferencia. 

Amar implica mayor consciencia para no dejarse llevar por los programas del juicio.

Amar también requiere de mayor consciencia, para mantener una distancia de seguridad sobre aquellos, que por programación personal producen daños a la vida. Al mismo tiempo, amar desde la distancia al que no ama, en un buen acto de amor.

El amor es una energía no contaminante que solo requiere voluntad de amar. El amor es la energía universal sin efectos secundarios. El amor produce cambios emocionales que mejora el planeta y la vida.

Imagina como John Lennon en "Imagine" un planeta nuevo, vivo, de encuentro, de aceptación, de abrazo, de ilusión. Imagina que esto es posible, pues podemos crearlo si empezamos a imaginarlo y practicarlo.

Imagina que el amor es el motor y alimento de nuestra vida. 

Feliz año nuevo. Feliz amor.

  

AGRADECER TAMBIÉN ES AMAR

El agradecimiento conecta la vida y es alimento para al ser humano. 

Agradecer con plenitud la experiencia de vivir, caminando hacia aquello que armoniza la vida, tu vida y la mía.

Agradecer es amar, amar sin apegos, amar respetando la vida en su totalidad. El Amar también necesita apartar el juicio de valor o destructivo.

Agradecer también es aceptar, aceptar la vida y sacar lo máximo de ella desde las posibilidades personales de cada ser. Agradecer lo material, forma parte de nuestra vida y vivencias.

Agradecer que cualquier ser humano está viviendo la vida, he intentando hacer las cosas lo mejor que sabe. Buscando sentido, buscando ilusión, buscando amor. Siempre con la intención de ser feliz. Agradecer que todos somos necesarios para vivir. Agradecer que el agricultor nos aporta alimentos, agradecer que el constructor nos hace casas, agradecer que el maestro nos da formación, agradecer que los padres nos dan la vida y un punto de partida, agradecer...

Agradecer que nuestro cuerpo físico aporta infinitas posibilidades y podemos hacer uso del mismo a voluntad. Agradecer a nuestras células, nuestros órganos, nuestros huesos, etc... por encargarse de mantener nuestro cuerpo con vida.

Se puede estar agradeciendo sin parar. Y "PARAR", también es importante para conocerse, sentirse, valorarse, escucharse y amarse sin ningún tipo de condicionamiento mental o físico. 

Te deseo felices fiestas y que el amor y el agradecer impregnen tu esencia. Y pueda, puedas y podamos amarnos sin condiciones. Desde el respeto, el encuentro, la aceptación.

Felices fiestas y felices encuentros.

LLEGO EL DÍA Y LA ÉPOCA


Siempre me he preguntado por la forma correcta de vivir la vida. La respuesta llegaba corriendo a través de los clanes sociales, religiosos y familiares. Que siempre han sido y son los portadores de respuestas.

Haz esto, haz lo otro, hay que hacer esto aquí, esto allá y así uno va formándose y respondiendo al día a día. 

Llego un día en que lo que me aportaban los clanes me era insuficiente para estar tranquilo y en paz conmigo. Después de buscar, vivir y a veces sufrir, las respuestas fueron llegando poco a poco o a su debido tiempo. 

Haz lo que sientas, haz lo que te aporte paz, plenitud, tranquilidad, armonía y amor.

La siguiente etapa, fue aprender a empezar a sentir, a saber sentir, a saber lo que uno siente y distinguir lo que uno siente a pesar de de todo el ruido que llega de fuera.

Ruido en forma de "ahora toca". Ahora toca celebrar, ahora toca regalar, ahora toca viajar, ahora toca ir de fiesta, ahora toca, y un sin fin de ahora toca.

Y me pregunto yo, ¿Quien programa el ahora toca?

La respuesta está bastante clara y mencionada al inicio del texto.

Y quizá "ahora toca" vivir haciendo lo que siento y sintiendo lo que hago.

La época de caminar hacia donde marcan los clanes siempre estará ahí para vivirla cuando a uno le apetezca. Llego la época del empoderamiento personal, en el que uno ha de elegir su camino y caminar. Llego la época de caminar respetando y respetándose, llego la época de vivir presente y caminar consciente. Llego la época en la que una vez despierto o quizá memos dormido tenga que hasta construir su propio camino. Llego la época en que el autoconocimiento me acerca a tener la vida que deseo. Llego el momento de la rebeldía sabia para respetar y respetarse haciendo lo que a uno le demanda su ser. Llego el día en que para amarse se necesita saber sentir y sentirse.

Como toda experiencia personal, esta puede que sea la de uno o más de uno. Y también, puede que no sea la tuya. No importa. Cada uno tiene que hacer lo que sienta.





VALORAR, ACEPTAR Y AMAR


Valorar es un acto de amor. Nos ayuda mucho el contraste. Aquello que no nos agrada, ayuda a valorar lo que nos gusta. Desde esta perspectiva, lo que gusta y lo que no gusta forma parte de nuestro propio aprendizaje y autoconocimiento.
Valorar las cosas que tenemos, la vida, la salud, la amistad, el amor, la oportunidad de crecer cada día mirando todo como un  niño ilusionado ante la llegada de los reyes magos o la magia de un ilusionista.
Valorar distanciándonos del juicio de valor, que corroe la valoración objetiva y tiene poca o nula perspectiva. Pues todo lo que gusta y lo que no gusta forma parte de la vida. Todo sirve.
La caída sirve para aprender a andar, sin caída no hay aprendizaje.
Así pues, valoremos con amor toda circunstancia de la vida, toda persona, ser, o experiencia pues de ahí sacaremos nuestra realidad y quienes somos.
Desde la azotea del amor, el caminar se vuelve algo más ligero.
Desde una consciencia más acorde a nuestra verdadera esencia se vive más alineado hacia nuestro propósito de vida.
Desde el agradecer cualquier experiencia, se siente el ser humano mejor.
Desde el abrazar sin juicio de valor al otro se divisa una perspectiva agradable y feliz.
Desde el autoconocimiento personal se valora, acepta y ama la vida en su totalidad.

DEL ENAMORAMIENTO AL AMOR


Ana a sus casi cuarenta, ha vivido bastantes experiencias en su vida, ya se encuentra en esa edad que es punto de inflexión en la existencia de la mayoría de seres humanos.
Realiza un trabajo vocacional y dedicado a los demás. Ha estado enamorada de forma ingrávida y sutil durante muchos años de su pareja. Y ha empezado a sentir que ya no lo ve igual, que ya no siente las mariposas de los primeros años.  
Esto la lleva desconcertada, alberga dudas sobre su amor. Se maneja entre compartir lo que siente con su amiga del alma. Necesita compartir lo que vive y siente. Y por su puesto, tiene miedo de hablarlo con su pareja.
En un acto de valentía y necesidad comparte sus emociones con su amiga Isabel.
Isabel viene de experimentar estas dudas también en su relación. Ella ha estado investigando y buscando respuestas a sus sentires y por su vida han pasado libros de crecimiento personal, además, ha realizado diferentes cursos de formación enfocados todos al autoconocimiento. 
Viene impactada por los últimos cursos de autoconocimiento, donde ha despertado mayor consciencia personal y empoderamiento para vivir desde su sentir.
Ha llegado a entender que nuestros sentires están marcados por nuestro programa personal de creencias. Entiende que no se puede generalizar lo que pensamos desde nuestra mirada, ya que  nuestra mirada tiene el enfoque de nuestra programación personal. Y que nuestra programación mental obedece a nuestras experiencias en los clanes donde nos hemos desarrollado. Ya tiene claro que vemos a los otros con nuestras lentes, graduadas solo para nosotros. Y entiende, que el enamoramiento es un momento especial a vivir, en el que no llevamos gafas, lo cual nos ayuda a sentir las emociones ingrávidas y sutiles. Y el día que nos colocamos nuestra gafas vemos y sentimos según nuestro propio programa. 
Isabel cerveza en mano, hace consciente a Ana de esto y la invita a amar con gafas, con todos sus programas. La hace consciente de que uno de los retos de la vida es amar conscientemente, observando todos los pensamientos internos y buscando a que se debe esa forma de ver la vida y pensar. También, la invita a cambiar creencias por otras que la lleven a vivir mejor y más feliz.
Ana ahora es consciente de que a través del autoconocimento, tiene la oportunidad de vivir lo que es el amor verdadero. Ahora es consciente de que puede necesitar cambios de lentes a medida que vaya viviendo la vida y experimentándola.



MEJORANDO LA VIDA


Este post está dedicado para todas aquellas personas que dedican tiempo y recursos para mejorar la vida de otros.
Lo hagan desde donde lo hagan, gracias.
El planeta tiene seres humanos que a través de sus acciones, colaboraciones, dedicaciones, aporte de recursos, generan cambios muy importantes en la vida de otros seres humanos con menor acceso a educación, salud, alimentación, calidad de vida, etc...
Por ellos y por lo que aportan, gracias.
En el fondo es un acto de amor ayudar a otros, desde el ofrecimiento y la aceptación de la ayuda. Nunca desde la imposición.
Conviene solicitar permiso, ofrecer y esperar su aceptación. 
Amar, también es participar en generar una vida mejor en el planeta.
A veces no se necesitan grandes gestas, a veces con vivir con amor es suficiente.
Gracias a todos y en especial a aquellos que sienten la necesidad de participar en la mejora de la vida de una persona, o un ser vivo. 
La vida es perfecta para nuestro crecimiento y las personas estamos inmersas en ella.  Todo ser  humano en su esencia más íntima desea el bien. Así que celebremos la oportunidad de crecer en conjunto y con amor para crear vida de encuentro y colaboración.